top of page

La asombrosa experiencia de las Constelaciones Familiares

  • ANA MARIA TORRES
  • May 23, 2021
  • 2 min read

Llevo 14 años trabajando con las Constelaciones Familiares, y todavía me sigo asombrando de cómo funcionan y el efecto que tienen. Seguramente en parte porque yo misma soy una persona que valora la racionalidad y busca la seguridad de aquello que se puede fácilmente explicar.


Cuando conocí este método, llevaba un tiempo trabajando con diferentes abordajes terapéuticos. Estaba encantada con los métodos de trabajo con el cuerpo, los estados ampliados y alterados de conciencia, los efectos de las diferentes clases de meditación. Mi propia tésis de grado había sido un estudio sobre los beneficiosos efectos psicológicos que tienen las experiencias espirituales, que coinciden independientemente de la religión, práctica o creencia.


Era todo un universo de experiencias que no paraba de abrirse, por explorar. Pero la primera constelación en la que participé, me dejó realmente impactada. No se parecía a nada de lo que había conocido hasta ese momento. Si acaso aparentaba alguna semejanza con el psicodrama, ¡pero acá resultaba que nadie estaba actuando! Además, el foco ya no era la profundidad del individuo, ¡sino el inconciente de la familia!


ree

Jamás hasta ese momento había tenido noticia de nada similar. Emprendí con fascinación el camino de entrenarme como terapeuta en esta técnica, sabiendo poco en realidad de todo el conocimiento que fundamentaba este trabajo y más por el asombro de su fenomenología. Sabía poco sobre los “órdenes del Amor”, -la filosofía y cuerpo de conocimientos que lo sustentaba-, pero en realidad nada acerca del efecto en la psique que tienen las historias ocultas o sin resolver que vivieron nuestros ancestros.


¿Como puede ser que mi vida tenga algo que ver con alguien que ni siquiera conocí? Y lo que es más asombroso: alguien de quien nunca, jamás, oí hablar. Como podía ser que luego de conocer la historia algo cambiara para mí. Que una persona que no sabía nada sobre mí ni de mi vida sintiera como uno de mis seres queridos; que yo experimentara en mi interior reconciliaciones de viejos resentimientos. Que cosas que pasaban en la Constelación generaran cambios tan profundos en mi vida y que me resultara inolvidable lo que había visto y vivido allí.


Como nos pasa a muchos terapeutas, a lo largo de los años el resto de mi trabajo se fue integrando con las Constelaciones, y fui desarrollando una manera propia de trabajar. Cientos de sistemas me confiaron sus dificultades y fue algo maravilloso apoyar su conciencia y liberación. Como también trabajo como psicoterapeuta, puedo darme cuenta y comparar cuanto tiempo de trabajo se ahorra a través de una Constelación Familiar. Puedo afirmar con gratitud, que su existencia es una bendición.


Hace ya tres años que me dediqué a entrenar en esta maravillosa técnica (aunque este término parezca quedarle corto a su profundidad). Estoy por comenzar un nuevo grupo para su tercera versión. Hoy por hoy es mi deseo que cada vez seamos más haciendo un trabajo respetuoso, amoroso y con vocación, para más sistemas familiares. Esta es mi manera de contribuir a la construcción de una más armoniosa y feliz humanidad.

 
 
 

Comments


bottom of page